Después de un mes de Junio intenso y muy demandante, decidí en Julio controlar la inercia con la que venía y pasar un tiempo sin documentar, sólo observando y organizando. Al revisar las imágenes del 2014 sin pasiones eliminé muchas que no cumplían mi criterio (el de ese momento) y esa actitud me ayudará a ser más selectivo y específico con las futuras tomas. En la cantidad y variedad de imágenes queda evidenciado el gran aumento en el número de colibríes, crías de este año y la incorporación de otras especies. Las numerosas imágenes fueron hechas a diferentes horas, ángulos y programación de la cámara, intentando romper la monotonía. Varias fotos me sorprendieron, en ellas aparece el colibrí macho ♂ Mango Pechinegro [Black Throated Mango (Anthracothorax nigricollis)] con cuerpos musculosos, cual padrotes o sementales.
A mi no me sorprende que los colibríes estén sanos y fuertes, ya que en el jardín y entorno del conjunto residencial cuentan con una abundante reserva de pequeños insectos, flores sembradas, árboles de temporada en flor y ya somos cuatro vecinos que les proveemos de néctar en tres de los cuatro edificios. Lo que si me sorprende es que se vean casi «gordos» por tan sólo un instante, ya que el mismo individuo en las siguientes imágenes luce atlético, de fina y elegante estampa. No pude impedir asociar las imágenes a la obra de Botero, si él incluyera colibríes en sus pinturas o esculturas imagino que lucirían así.
Hoy en el post destaca la infanta Margarita Teresa de Austria, personaje central de Las Meninas de Velásquez, versión del artista colombiano Fernando Botero (sin colibríes). Próximamente publicaré incluyendo otras obras acompañadas de fotos de colibríes en donde se percibe el efecto o síndrome Botero.