Desde el amanecer los cantos enérgicos y constantes de varios machos de Reinita Común captaron mi atención. Vino a mi memoria lo que hace pocos días compartí con los amigos de Caracas Alada: «Desde hace varias semanas las Reinita Común [Bananaquit (Coereba flaveola)] han estado muy activas. Los machos cantaron mucho hasta que consiguieron pareja y…, las hembras han estado en un ir y venir, un verdadero corre-corre. Las crías siguen a la madre como su sombra, por momentos parecen adultos hasta que se esponjan para pedir…»
En mi posición lo que hago es observar, documentar con imágenes (cuando puedo) y contar la experiencia compartiendo el momento. Es un gusto que aún me permiten las limitaciones de la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA, ALS ó MND) que padezco.
Durante mi paseo diario intenté descubrir la ubicación de los machos cantarines, esperaba como otras veces ver a los pretendientes posados y haciéndose notar. Lo que observé me sorprendió un poco, la escena se repetía como calcada: los machos cantaban y perseguían a las hembras hasta que se posaban. La insistencia era efusiva y recurrente, canto, persecución, acoso, canto, persecución…
Las hembras eran perseguidas y demandadas por sus crías; hasta que recientemente se independizaron. Tal vez la gran cantidad de floraciones (comida) influyó en los machos y solapó esta inminente nidada normalmente distanciada por varios meses.
Estas pequeñas y vivarachas aladas se alimentan de casi todo: frutas, insectos, néctar y opino que si las semillas son blandas también las comerán. Pareciera que valoran su tiempo, intentan varias veces obtener lo que quieren, varían la forma y si no lo logran se van. Vuelven más tarde y siguen intentándolo hasta lograrlo. En el caso de nuevos comederos ellas los descubren antes que los colibríes y curiosamente cada Reinita C. tiene un ritual particular para acercarse y alimentarse (la que le funcionó): volando como un colibrí, colgándose precariamente, brincando, etc.
Las hembras tendrán un considerable desgaste, pero estoy seguro que superarán la exigente situación, los tiempos difíciles porque ellas son intrépidas, rápidas y acertivas, (las reinas de la adaptación),