Arde, arde el cielo y el dolor, arde mi espíritu…

El sábado pasado disfrutamos de un agradable día de playa en Paparo-Rio Chico. Debido a mi condición, vamos a playas donde podamos llegar con el carro a la primera linea de playa. Debido a que la corriente estaba Oeste-Este (contraria al sentido habitual), el mar estaba muy revuelto y pocas personas se arriesgaron a bañarse. Regresamos poco después del almuerzo, cerca de Caracas estaba pendiente de las siluetas de las montañas, de repente el corazón se me arrugó. Veía lo que nunca quiero ver en la montaña, una gran columna de humo que indicaba un incendio voraz y de grandes proporciones. Pocos días antes se había quemado la zona del Estribo Duarte, cientos y miles de arboles plantados unos por trabajadores pagados, otros plantados por familias que subían el sábado o domingo y compartían el incomparable momento. «Arde, arde el cielo y el dolor – arde mi espíritu, arde el amor y la luz – arde el cielo amor – Sangra, sangra el cielo y la luz – sangra mi espíritu – arde el amor y la luz – arde el cielo amor« la canción de Maná es más que elocuente. Así me sentía, arde mi espíritu, arde el cielo y el dolor. No puedo ver la montaña quemándose, sin dejar de pensar que para muchas de las especies de aves es época de cría. Cientos, miles de huevos o pichones de las variadas especies de aves calcinados. Si eran jóvenes o adultos y escaparon al lugar adecuado se pudieron salvar, seguramente muchas parejas se separaron y dispersaron, dependieron del azar. No es una imagen plana que se quema, son miles y miles de seres vivos, micro-organismos, plantas, árboles, insectos, mamíferos, aves.

ArdeElCielo

Siempre podemos colaborar, una llamada o mensaje a tiempo puede controlar tempranamente un incendio y salvar no una, sino miles de vidas. Cuando comiencen las reforestaciones, participar masivamente. En la subida de Cachimbo, Estribo Duarte, Terrazas del Avila, el verdor regresará a la montaña, los grises y negros desaparecerán. La tierra sanará sus heridas, volverán las aves, anidarán. Oiremos de nuevo sus cantos, disfrutaremos sus colores como en las excelentes fotos de Kripsy Herrera. Gracias por tu aporte Kripsy, bienvenida, tú eras y serás una Semilla de Vida.

KripsyHerreraSDV

Créditos:
Fotos: Dormelys León      http://www.6topoder.com/
Fotos: Francisco Blanco  http://www.noticias24.com/
Fotos: Angel Obertein      http://www.ultimasnoticias.com.ve/
Foto: @rafaleon             http://redigitaltv.com/
Foto: (?)                         http://www.fmcenteresnoticia.com.ve/

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2 pensamientos en “Arde, arde el cielo y el dolor, arde mi espíritu…

  1. En verdad fue doloroso como lo es cada año si acaso se presenta, sin duda el fuego tiene algo que atrae, que embelesa, uno no puede dejar de mirar el espectáculo pero lejos de sentir júbilo lo que se siente es una profunda tristeza… Sembrar conciencia es indispensable, con nuestro aviso a tiempo podemos hacer la diferencia. Sumemos en ayuda no en indiferencia.

  2. Lástima que lo que pudo haber sido un maravilloso día de playa se viese enturbiado por algo tan triste y destructivo como es el fuego. A y causar daño quí, durante la época estival, tú sabes que los incendios forestales son muy frecuentes y, lo más triste, que casi siempre han sido intencionados. Es una pena que haya gente que sea capaz de destruir algo tan hermoso como es la naturaleza…De verdad que deberíamos de pensarlo seriamente.
    ¡Gracias por este hermoso post, Pepe; las aves son preciosas!

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