Desde hace más de tres años he usado una imagen (avatar) para representarme, en Youtube, Facebook, G+, Flickr, Gravatar, Inspirulina, Blog, etc. Para mí es muy valiosa y tiene un gran significado, será ahora de despedida que contaré sobre su origen. Suelo pasar muchas horas editando, escribiendo, navegando en el computador. En esa área siempre trato de tener plantas de mi agrado, comederos para pájaros, bebederos, et. Con ello a través del tiempo, he propiciado una increíble relación con los pequeños visitantes (reinita común, tiaris bicolor, colibríes, etc.). En el apartamento anterior tenía una jaula, las entradas las reduje para evitar las tortolitas. A esa jaula los tordillos (tiaris bicolor) entraban libremente, comían, los machos cantaban y hasta se resguardaban de la lluvia. Cuando tenían crías eran de dos a tres pichones por pareja, durante casi un mes el balcón parecía una guardería (parvulario). El constante y repetitivo piar de los pichones, comenzaba antes del  amanecer y terminaba con los últimos rayos de luz. Sentado frente al computador, era testigo de las innumerables travesuras y constataba las diferencias entre los individuos desde muy temprano. El pichón del avatar fue un claro ejemplo, en uno de sus primeros vuelos llegó al techo de la jaula, desde allí abría y cerraba sus alas al mismo tiempo que piaba. Tal fue su insistencia que busqué la cámara y le saqué una foto, la que quedó como testimonio no de las destrezas del fotógrafo, sino de la colaboración del pequeño modelo.

Dejando la casi clandestinidad con el avatar, esta u otra imagen mía respaldará los escritos. Dejará de ser un pajarito el que les cuente, creo que se los debía y hoy me pongo al día presentándome. Para los curiosos ó curiosas: el zarcillo en mi oreja izquierda es una «Triqueta, trisqueta ó triquetra», de origen celta con variados significados para unos es:vida, muerte y renacimiento; para otros es el equilibrio entre tierra, aire y agua.

Hablando de equilibrio, nada con más tensión y nervio que el Tour de France, con las bajadas con curvas, a increíbles velocidades, con lluvia ó llegadas a meta en pelotón, rozándose o separados por mms. Un pequeño toque puede cambiar el curso de la carrera, de una profesión, de una vida. Para Ligi, Ro y amigos deportistas, con los que compartí y de los cuales aprendí mucho, hasta a mantenerme en equilibrio.